SOPA

sábado, 8 de octubre de 2011

Generalidades del sistema oseo

Los huesos del esqueleto humano soportan el peso del organismo y configuran su forma carcterística. Sirven tambien de protección a los órganos vitales y actuan como palancas que permiten los movimientos. Funciones menos evidentes son la producción de las células de la sangre y esenciales, principalmente el calcio. Los huesos se clasifican en cuatro tipos según su forma: pueden ser largos, cortos, planos o irregulares.


Los huesos largos constan de una parte alargada (diáfisis) con un engrosamiento en ambos extremos (epífisis). La diáfisis es un tubo con paredes gruesas formadas por hueso compacto y relleno por la médula ósea amarilla, mientras que los engrosamientos distales están formados por hueso esponjoso recubierto por una delgada capa de hueso compacto. Los huesos de las piernas, de los brazos y las costillas son huesos largos.



Los huesos cortos tienen una forma más o menos cuadrada, con un centro esponjoso y una delgada capa periférica de hueso compacto. Se localizan en lugares determinados, como tobillos y muñecas.



Los huesos planos poseen una estructura similar a los cortos. Ejemplos característicos son los omóplatos y los huesos del cráneo. Cualquier hueso no incluido en las tres categorias descritas se denomina hueso irregular, como son los de la cara y columna vertebral.



Los huesos esponjosos contienen la médula roja, productora de las células de la sangre. En los niños, la diáfisis de los huesos largos tambien contiene médula roja, pero en el adulto ha sido sustituida por médula amarilla, que produce células hemáticas únicamente en circunstancias de extrema necesidad.



La conexión entre los huesos se realiza por articulaciones inmóviles (sinartrosis), ligeramente móviles (anfiartrosis) y de movilidad amplia (diartrosis). Las primeras, ayudadas por un tejido fibroso, mantienen los huesos íntimamente unidos, como en el cráneo. Las segundas, o de movilidad limitada, mantienen los huesos en coexion por medio de un disco cartilaginoso, como en la columna vertebral. Las articulaciones de movilidad amplia disponen de una cápsula firbosa que limita con los huesos y una cavidad articular que contiene un líquido lubricante: son ejemplos los codos o las rodillas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario